El día que los sordos aprendieron a escuchar a través de la piel

Mara Dierssen durante la entrevista con Activa Tu Neurona.

La investigación en neurociencias conseguirá en un futuro cercano desarrollos tecnológicos tan espectaculares como este y perfeccionará la técnica para que podamos controlar con la mente ordenadores o brazos robóticos. Pero los investigadores también advierten: “En la próxima década, un tercio de la población se verá afectado por enfermedades cerebrales”. “Conocer para curar” es el lema del Basque Center for Neuroscience, más conocido como Centro Achúcarro, co-organizador, junto con la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU, de la conferencia que Mara Dierssen, investigadora y presidenta de la Sociedad Española de Neurociencia, ha impartido esta tarde en Bilbao con el título “Los escultores del cerebro”.

Mil millones de neuronas en nuestros cerebros son las responsables de que sintamos emociones como la tristeza, la alegría o la obsesión. Caer en la euforia o la melancolía depende de las sustancias químicas que se liberan en las conexiones que establecen las neuronas,  a las que Santiago Ramón y Cajal llamó, cual si fuera un enamorado, “besos protoplasmáticos”.

El mes europeo del cerebro ha sido elegido por el Centro Achúcarro para estrenar la primera de las conferencias divulgativas que va a organizar en los próximos meses, para acercar a la sociedad la investigación en neurociencias. Una disciplina que trata de averiguar más sobre nuestra propia naturaleza.

Saber que ocurre en nuestro cerebro cuando nos emocionamos, aprendemos un idioma, leemos un poema o soñamos, son sólo algunas de las curiosidades en las que este grupo de científicos ensaya los procedimientos de investigación que tienen aplicación en dos colectivos humanos habitualmente silenciados. Las personas que sufren síndrome de Down o Alzheimer. Mejorar la calidad de vida de estas personas es un trabajo científico que puede llevar décadas sin que los equipos de investigación obtengan resultados positivos.

Sin embargo, los expertos advierten de que no sólo debemos pensar en las personas afectadas por enfermedades que causan alteraciones a nivel neuroquímico, o tienen trastornos de aprendizaje o de la memoria, como posibles beneficiarios de la investigación en neurociencias. Según la doctora Dierssen, quienes sufren de estrés, pueden presentar una arquitectura cerebral alterada parecida a la de quienes padecen síndrome de Down, Alzheimer o esquizofrenia.

Una de las ilustraciones mostradas durante la conferencia. Credit:Ahajokes.com

Un cerebro con menos neuronas o que tiene árboles (dendritas) más pequeños o con menos conexiones, es menos capaz de producir el lenguaje eléctrico que impulsa nuestra actividad mental.

Por eso es tan importante el concepto de plasticidad neuronal. La conferenciante la ha definido como la capacidad del cerebro para modificar su función o su estructura a partir de la experiencia o del entorno, lo que nos permite aprender o mejorar nuestro comportamiento.

Plasticidad

La plasticidad hace que las propias neuronas cambien físicamente en función de las experiencias sociales y el entorno. Dierssen asegura que nuestro cerebro cambia físicamente para adaptarse y aprender. “Lo bien conectada que tengamos nuestras neuronas marcará la diferencia en nuestra capacidad para procesar información”.

La plasticidad se hace por lo tanto fundamental, sobre todo en la niñez. Un estudio en niños japoneses ha determinado que estos con capaces de discriminar los sonidos R y L del castellano, mientras que sus padres han perdido esa capacidad.

En una conferencia llena de magnificas analogías, Dierssen ha logrado explicar al público que abarrotaba la sala Baroja del Bizkaia Aretoa, algunas de las investigaciones en las que trabaja su equipo.

La doctora Dierssen en un momento de la conferencia. Credit: Activatuneurona

Futuro

El futuro de la neurociencia, ha anunciado, pasa por establecer modelos matemáticos que ayuden a explicar el comportamiento del conjunto de la red neuronal, frente al estudio de la actividad de una neurona o de un circuito en una zona acotada del cerebro.

En una entrevista concedida a Activa Tu Neurona, Dierssen ha vaticinado que en un futuro cercano, las noticias sobre neurociencia llenarán los medios de comunicación. Como ejemplo, un chaleco que ya está desarrollando un grupo de investigación, que traduce sonido a vibraciones, por lo que los sordos podrán escuchar aprendiendo a identificar las vibraciones a través de la piel.

La entrevista completa con Mara Dierssen está disponible en nuestro canal de Ivoox.

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